En mí, apenas unas ascuas silenciosas,
pienso en su hogar la propia tierra, el árbol y la roca del hogar,
pienso en el ardor de saberse cobijado, pienso en sombras sin espacio,
un lugar y mi nombre, en asumirme y tal vez consumirme,
mi sangre ya no me habla de ímpetu, solo de escarcha,
duerme- me digo- duerme tras la sombra del sueño vientre.
un desenlace humano, yacer en el vientre ahuecado de su existencia
ResponderEliminarsaludos
Descansar Omar, descansar por un tiempo. Saludos
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